Instrucciones

Hierve 200g de garbanzos y 300g de espinacas congeladas o 2 manojos de espinacas frescas durante unos minutos en agua caliente y escurre bien. En una sartén, saltea 1 tomate rallado y 1 diente de ajo en 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra. Añade los garbanzos, las espinacas, una pizca de cilantro, comino, 10ml de agua y sal marina, y cocina unos minutos. Opcionalmente, añade jamón ibérico picado para más proteínas y grasa. Si utilizas garbanzos enfriados (para obtener más almidón resistente), recalienta con las espinacas solo unos minutos.

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La adición de jamón ibérico (opcional) proporciona proteínas y grasas de calidad.